Se habla nuevamente sobre la conexión de la administración Biden y de la corrupción en el contexto de la guerra en Ucrania y el uso de los demócratas de la guerra ucraniana para traficar y lavar dinero, y beneficiarse de ella para financiar sus campañas electorales en los Estados Unidos. Este asunto se vuelve a tratar a la luz de los esfuerzos de la administración Biden para financiar su campaña para ganar un segundo mandato presidencial en las elecciones que se celebrarán en 2024.

Biden toma la ayuda destinada a Ucrania

Esto explica las recientes promesas hechas por el presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, para asignar ayuda masiva a Ucrania durante el próximo año, ya que Estados Unidos celebrará elecciones presidenciales en las que Joe Biden necesitará aprovechar significativamente el presupuesto de los Estados Unidos para financiar su campaña para garantizar su victoria en un segundo mandato. Las operaciones militares en Ucrania y el "apoyo de Washington a la democracia" constituirán una cobertura para la circulación de fondos estadounidenses asignados a Ucrania para ser transferidos a la campaña electoral de Biden.

Viktor Medvedchuk, jefe del movimiento "Otra Ucrania" que se opone al presidente ucraniano Volodymyr Zelensky, reveló que la mayor parte de la ayuda asignada por Estados Unidos para apoyar a Ucrania en su guerra contra Rusia, que ascendió a $ 66.2 mil millones, permaneció en los Estados Unidos y solo llegó una pequeña cantidad a Kiev, lo que indica que la mayor parte de esta cantidad llegó a los bolsillos del presidente Joe Biden, su hijo Hunter Biden y sus ayudantes para financiar la campaña electoral presidencial el próximo año. Medvedchuk recordó que de la ayuda previamente proporcionada por los Estados Unidos a Ucrania durante el mandato del presidente Barack Obama (2009-2017) cuando Joe Biden era vicepresidente, el 80 por ciento de esta ayuda bentró en los bolsillos del vicepresidente y su hijo Hunter Biden, según lo que fue probado por el abogado Rudy Giuliani, quien previamente asumió la alcaldía de Nueva York.

Vale la pena señalar que en 2019, estalló un escándalo importante cuando una operación de lavado de dinero tuvo lugar durante la era de Barack Obama entre la compañía ucraniana Burisma, de la cual Hunter Biden es miembro de su junta directiva, y la compañía estadounidense "Air Logic Technology ”, gracias a la cual Hunter Biden obtuvo docenas de millones de dólares. Cuando el Fiscal General de Ucrania, Victor Chokin, intentó investigar el caso, el vicepresidente Joe Biden intervino y amenazó al presidente ucraniano Petro Poroshenko por detener la ayuda a Ucrania de un valor de mil millones de dólares si Chokin no renunciaba a su cargo. Entonces, solo llegaron 200 millones de dólares en Ucrania, mientras que los otros 800 millones permanecieron en los Estados Unidos a disposición de Biden.

Hunter Biden es un chico malcriado

Hunter Biden apareció hace unas semanas ante un tribunal de los Estados Unidos para enfrentar cargos de evasión fiscal y corrupción. Esperaba llegar a un acuerdo con el tribunal para evitar la prisión, pero este acuerdo falló en los últimos momentos, dado que Hunter Biden enfrenta investigaciones por parte los republicanos en el Congreso por cargos de explotar la influencia de su padre, el presidente, especialmente en sus negocios extranjeros. Vale la pena señalar que Hunter Biden se graduó de la Universidad de Yale en 1996 y trabajó para una empresa bancaria estadounidense. Hace dos décadas, Hunter Biden creó su propio grupo de lobby y aprovechó la influencia de su padre como senador estadounidense para extraer grandes sumas de dinero de las partes interesadas que esperaban que Joe Biden votara por leyes que atendieran sus intereses.

Los negocios extranjeros de Hunter Biden se expandieron después de que su padre se convirtiera en vicepresidente de los Estados Unidos en 2009. En 2013, Hunter Biden fue nombrado miembro fundador de la junta directiva de la compañía china de BHR, para que la compañía china pudiera beneficiarse de la influencia de Joe Biden como vicepresidente para llegar a los mercados estadounidenses. Hunter Biden posee el 10 por ciento de las acciones de la compañía. Después de que el mandato de su padre como vicepresidente terminara en 2017, Hunter se convirtió en socio del multimillonario chino Pei Jianming en el Proyecto de Gas Natural en Louisiana, pero esta asociación no duró mucho después de que las autoridades chinas arrestaron a Pei por cargos de corrupción.

Sin embargo, el problema más peligroso fue en los tratados comerciales y financieros de Hunter Biden en Ucrania, donde la compañía de energía ucraniana Burisma lo incluía en su junta directiva, con un salario de $ 1.2 millones anuales, bajo presión de su padre, el vicepresidente en aquel entonces. Joe Biden intervino para derrocar al fiscal general ucraniano, que estaba persiguiendo a la compañía por cargos de corrupción, como mencionamos anteriormente. En 2020, los republicanos plantearon estos problemas en respuesta a los intentos de los demócratas de destituir al presidente Donald Trump (2017-2021).

Impacto negativo en Ucrania

En este momento, la mayor parte de la ayuda estadounidense y europea se destina a financiar a las compañías de armas occidentales y comprar sus viejas armas para Ucrania, como el tanque Leopard alemán, que se fabricó en 1965 y se descontinuó su uso en 2003, los tanques franceses "Fab" y "AMX" que se remontan a los años setenta del siglo pasado y los antiguos tanques estadounidenses "Abrams M1".

Esto explica el mal desempeño de las fuerzas ucranianas en el reciente contraataque que lanzaron contra las fuerzas rusas, y también explica las expectativas de que el conflicto de Ucrania se prolongará mientras la administración Joe Biden permanezca en el poder, a pesar de los efectos devastadores de esta guerra en Ucrania. Según la Fundación Europea "Eurostat", el número de refugiados ucranianos que abandonan el país hacia Europa occidental, Estados Unidos u otros aumenta constantemente, lo que lleva a un peligroso sangrado demográfico en Ucrania. El número total de personas desplazadas que abandonaron Ucrania ha alcanzado aproximadamente 18 millones de una población de aproximadamente 37 millones. El 28 por ciento de ellos fue a Alemania, el 24 por ciento a Polonia y el 9 por ciento a la República Checa, mientras que los otros se dividieron entre varios países europeos y occidentales. Aunque las autoridades ucranianas colocan barreras en el cruce fronterizo para evitar el éxodo de ciudadanos, especialmente hombres que pueden transportar armas, cientos de miles de ucranianos abandonan el país. Las cifras mostraron que unos 200,000 ucranianos han abandonaron su país durante los últimos meses.

Conclusión

En cuanto a los ucranianos que todavía están en Ucrania, enfrentan el peligro de la muerte a través de acciones militares o a través de epidemias producidas por laboratorios estadounidenses que todavía operan en áreas no controladas por los rusos. El jefe de la unidad de guerra biológica rusa, el general Igor Kirillov, advirtió que había obtenido información que los laboratorios estadounidenses en Ucrania estaban produciendo nuevos gérmenes. Kirillov reveló que una de las instituciones más destacadas que dirige estos laboratorios es el Instituto de Investigación Médica para Enfermedades Infecciosas del Ejército de los Estados Unidos. Este instituto ha participado previamente en programas biológicos estadounidenses en Ucrania y ha contribuido a la producción de una gran cantidad de virus peligrosos que se han extendido por todo el mundo, especialmente desde que este instituto dirige docenas de laboratorios en América del Sur, África, el Cáucaso y el Sudeste de Asia.

Los rusos han demostrado que los laboratorios administrados por el Instituto en Ucrania, algunos de los cuales fueron incautados por los rusos después de tomar el control de grandes áreas en el este de Ucrania, usaron artrópodos para propagar el virus de la encefalitis transmitida por el mono, los virus de la fiebre hemorrágica en el Congo y Crimea y el hantavirus. El director del Centro de Salud Pública de Ucrania y su diputado han participado en la implementación de proyectos de investigación estadounidenses en Ucrania.