Campamento de Yenín, una historia de resistencia
Su gente, sus comidas y hasta sus llaves recuerdan el dolor de la Nakba en la historia de Palestina.
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Campamento de Yenín, una historia de resistencia
La ciudad de Yenín y su campamento tienen su propia simbología asociada a la resistencia dentro de las áreas de Cisjordania.
Su gente, sus comidas y hasta sus llaves recuerdan el dolor de la Nakba en la historia de Palestina.
Durante esos días de 1948, las fuerzas de ocupación israelíes provocaron el desplazamiento forzado de gran número de personas.
Muchas de ellas, procedentes de Yenín, se refugiaron de forma temporal en un campamento y allí permanecen hasta hoy.
Ubicado en el lado occidental de la urbe, este sitio abarca una superficie de 0,42 kilómetros cuadrados y es el segundo campamento más grande de Cisjordania después de Balata.
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Campamento de Yenín, una historia de resistencia
Todo comenzó en un jardín
La urbe de Yenín, situada a 41 kilómetros de Nablus, está rodeada por flores y huertas, de ahí proviene su antiguo nombre "Janim", que significa Jardines.
En la época romana, se llamaba "Jenai", y cuando los bizantinos heredaron el dominio del país, establecieron la iglesia de Jena.
En el siglo VII después de Cristo, los árabes musulmanes vencieron a los bizantinos y algunas tribus se establecieron allí.
Muchos de ellos conocían el país como como "Hinain", traducido luego a "Yenín", nombre que llegó hasta la actualidad.
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Campamento de Yenín, una historia de resistencia
Frente a los invasores y ocupantes
El pueblo de Yenín resistió a las fuerzas francesas y en 1935 organizó la primera rebelión contra la entonces ocupación británica.
Allí el mártir Izz al-Din al-Qassam encontró numerosos campesinos que creían y apoyaban la liberación nacional.
La ciudad volvió a ser noticia mundial en abril de 2002 durante una incursión de los colonos israelíes contra las zonas de Cisjordania.
En respuesta, los combatientes de la resistencia y el pueblo causaron decenas de muertos y heridos entre las filas de la ocupación.
Estos sucesos se renovaron una y otra vez, sobre todo en 2013, cuando el sionismo trabajó para arrestar a algunos de los combatientes palestinos.
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Campamento de Yenín, una historia de resistencia
La fecha del 6 de septiembre de 2021 trajo al mundo un gran logro, y los héroes fueron los prisioneros recluidos en una de las cárceles más fortificadas del régimen israelí: Gilboa.
Allí seis prisioneros palestinos lograron escapar después de cavar un túnel desde sus celdas con herramientas simples.
Unas semanas después de los acontecimientos, la resistencia anunció que formaría el "Batallón de Yenín" para enfrentar a los colonos.
Sin embargo, la maquinaria israelí no se detuvo. En la mañana del 11 de mayo de 2022 asesinó a la reportera palestina Sherine Abu Aqlehen en las afueras del campamento e hirió al periodista Ali al-Samoud.
Como es habitual, la ocupación escapó al castigo y en 2023 lanzó una nueva agresión con más de tres mil soldados, 200 vehículos militares y decenas de aeronaves.
Las fuerzas sionistas admitieron la muerte de uno de sus soldados, a cambio del martirio de 12 palestinos y las heridas de otros 100.
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Campamento de Yenín, una historia de resistencia
La mirada de la guerra
La memoria de la gente del campamento de Yenín no olvida las escenas de bombardeos y destrucción.
Al caminar cerca de sus casas uno ve a las ancianas lamentando las ruinas y mirando con tristeza y orgullo las imágenes de los mártires.
Si visitas el lugar hoy, el escenario será una mezcla de casas quemadas y calles destruidas. No hay agua ni electricidad en algunos barrios.
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Campamento de Yenín, una historia de resistencia
Algunas actividades reviven el sitio, como es costumbre después de cada asalto o bombardeo, pues hay muchas instituciones deportivas y artísticas.
Entre ellos, el "Teatro de la Libertad" siempre realiza funciones, pero esta vez tampoco quedó a salvo de los bombardeos.
Aún así, la gente sigue haciendo frente a la ocupación, y como dice uno de los combatientes: "Nosotros en el campo somos refugiados: nos refugiamos una vez, y no repetiremos nuestro refugio excepto para regresar a Haifa, Jaffa, Acre, Safed y todos los lugares ocupados en la Palestina ocupada”.
